El concepto de qué es hipoteca lo conoce casi todo el mundo, ya que es algo bastante corriente. El préstamo hipotecario es el recurso más aprovechado para financiar una vivienda.
Sin embargo, a pesar de su popularidad, hay muchos aspectos de las hipotecas que se confunden o se desconocen. Aquí vamos a intentar aclarar todos ellos, para que conozcas al detalle las características propias de las hipotecas y, de paso, aprovechar algunos consejos para saber cómo aprovecharlas lo mejor posible.
Características principales de una hipoteca
Una hipoteca consiste en un acuerdo financiero con el que una persona puede adquirir una propiedad, gracias a la obtención de un préstamo procedente del banco o de otra entidad financiera.
Aquí es importante diferenciar dos conceptos: préstamo hipotecario y crédito hipotecario. El primero se trata de un préstamo cuyo pago está garantizado por el valor de un inmueble. Es decir, supone un producto bancario que permite al cliente recibir una determinada cantidad de dinero para poder comprar una vivienda (que sería el capital del préstamo), por parte de una entidad bancaria a cambio del compromiso de devolver dicha cantidad, junto con los intereses correspondientes, mediante pagos periódicos.
En cambio, el crédito hipotecario es una cantidad de dinero que la entidad bancaria presta al cliente, quien puede disponer de forma total o parcial, durante un periodo de tiempo determinado, obligándose a devolver el capital y los intereses que se generen mientras dure el crédito, generados sobre la suma efectivamente utilizada.
¿Qué gastos de una hipoteca se pueden reclamar?
En el caso de que formalizaras tu crédito hipotecario antes del 16 de junio de 2019 hay ciertos gastos que puedes reclamar, en base a la nueva Ley Hipotecaria.
Los gastos que entran en esta reclamación son los siguientes:
- Gastos de notaría: puedes reclamar el 50%.
- Gastos de registro: puedes reclamar todos los gastos relacionados con el registro de la escritura de la hipoteca.
- Gastos de tasación: puedes reclamar el 100%.
¿Qué es mejor: hipoteca fija o variable?
¡La gran pregunta! La hipoteca fija y la hipoteca variable son las dos modalidades más conocidas a la hora de solicitar este préstamo.
En la práctica cada una tiene sus ventajas y desventajas. En estas cuestiones se diferencian:
- Hipoteca a interés variable: sus cuotas mensuales varían según el índice de referencia (normalmente el euríbor). Permite saber si es más o menos económica esta tipología a corto plazo, no a largo. Suele tener un plazo de devolución mayor y cuotas más reducidas.
- Hipoteca a interés fijo: sus cuotas mensuales no varían y el precio se mantiene fijo durante toda la amortización. Permite saber el importe a pagar en todo momento, lo que aporta estabilidad. Suele tener un plazo más reducido y cuotas algo más altas.
En realidad hay más tipos de hipotecas. Estos son otras modalidades:
- Hipoteca mixta
- Hipoteca inversa
- Hipoteca para colectivos
- Hipoteca para jóvenes
- Hipoteca para no-residentes
- Hipoteca puente
- Hipoteca para segunda vivienda
- Hipoteca flexible
¿Qué es una subrogación de hipoteca?
Hay diferentes operaciones relacionadas con las hipotecas. Te contamos aquí qué es una subrogación de hipoteca, una duda frecuente entre muchos usuarios.
La subrogación de hipoteca consiste en el cambio de hipoteca de una entidad financiera a otra, por lo general con el objetivo de modificar las condiciones financieras del préstamo hipotecario.
Requisitos para solicitar una hipoteca
A la hora de solicitar una hipoteca hay que presentar una documentación concreta. Para facilitarte la labor, te ofrecemos una checklist descargable con la que podrás revisar qué documentos necesitas para solicitar una hipoteca, ¡descárgatela GRATIS!
Preguntas frecuentes sobre las hipotecas
¿Cómo puedo comparar diferentes ofertas de hipoteca?
A la hora de elegir la mejor hipoteca para ti es importante que compares entre todas las disponibles. Con estas claves podrás hacer una comparación efectiva:
- En el caso de comparar hipotecas fijas, fíjate en el TIN y la TAE, además asegúrate de que estás comparando periodos de tiempo idénticos.Es importante fijarte si tiene comision de cancelación -total o parcial- y/o subrogación.
- Para comparar hipotecas variables tienes que valorar el índice de referencia como elemento más importante. Si el índice de referencia es el mismo, hay que fijarse en el diferencial que aplica el prestamista sobre el índice de referencia, y las comisiones (es importante fijarte si tiene comisión de cancelación -total o parcial- y/o subrogación). La variable idónea de comparación es la TAE, que incluye todos los gastos asociados.
- En ambos casos valora las comisiones que te cobran por diferentes servicios como apertura, amortización -parcial y total-, desistimiento, subrogación, etc.
- Por último, valora la posibilidad de contratar productos asociados si con ellos se mejoran las condiciones de la hipoteca. Esto es muy importante pues no se incluye en el cálculo de la TAE, y en muchas ocasiones el verse obligado a contratar un determinado seguro con la entidad prestamista (vida, hogar, etc) para mantener las condiciones financieras iniciales, puede no ser económicamente óptimo si contratamos estos seguros (el de vida no es obligatorio) con otras entidades aunque empeoren las condiciones iniciales. Hay que ver la operación en conjunto.
¿Qué impacto tiene el tipo de interés en la cuota mensual de mi hipoteca?
En el caso de las hipotecas variables, el tipo de interés depende de la evolución del euríbor. Estas hipotecas se revisan periódicamente, normalmente de manera semestral y anual y, en función de cómo esté el índice de referencia en la fecha de referencia, se aplicará la bajada o subida correspondiente durante el siguiente período (6/12 meses).